Hoy Esteban Ibarra realizaba su numerito habitual en el programa de Antena 3, Espejo Público, y como no su numerito lo realizaba con la total colaboración de Susana Griso y de los demás contertulios.
Como sabéis el otro día hablábamos sobre el caso de la brutal agresión que se perpetró en el Metro de Madrid por un joven que se identificó como Antifascista al ser detenido por dos policías.
Nada más conocerse este suceso mediante la exclusiva de Europa Press, diferentes medios intentaron dar la vuelta a la tortilla, intentando mostrar al agresor como de la ultraderecha, o intentando justificar la agresión como el resultado de las rencillas que el agresor de ultraizquierda y el agredido de ultraderecha tenían en la red, incluso llegando a decir que habían quedado para pegarse.
La realidad es bien distinta, y lo confirman las declaraciones del agredido y las propias imágenes de la cámara de seguridad. El agredido se ha declarado apolítico y dijo no conocer de nada al agresor, ni haber intercambiado ninguna palabra con él. Las imágenes confirman que el agredido no conocía al agresor, ya que el mismo no se inmuta al verle, y además no intercambia ningún golpe con él, siendo normal que si le conociese estuviese prevenido por una posible agresión.
Volviendo a la intervención de Esteban Ibarra en el citado programa, este se dedicó a mentir sobre la agresión con la teoría de que el agredido era de ultraderecha y afirmando que le había dicho una frase insultando a Carlos Palomino, “lo que hacía ver el fotograma de una forma diferente”.
Es curioso que Estaban Ibarra vea una justificación esa mentira, pues aplicando su lógica tendría que justificar la agresión a Carlos Palomino, ya en ella si se constató que hubo insultos e incluso se le llego a agarrar al agresor por la camiseta, con el agravante que el agresor se encontraba rodeado por un nutrido grupo de violentos.
Esteban Ibarra se ha vuelto a retratar, mostrándonos el perfil de un desgraciado que vive de denunciar la intolerancia, pero dependiendo de si el agredido es de izquierdas o de derechas, y que es capaz de justificar las agresiones que no benefician a su ideología política.
Siguiendo con sus declaraciones, este impresentable se presentó como una víctima en los diferentes medios que internet ofrece, quejándose de que Facebook no retirase los grupos que hay en su contra, grupos en los que incluso se pide su muerte.
Como era de esperar la sectaria de Susana Griso y sus colaboradores mostraron su indignación respecto a los grupos y el dato de que Facebook no los retirase, indignación que contrasta con el hecho de que ella y Esteban Ibarra no hagan lo mismo con otros grupos similares que existen, y más concretamente con el que se pedía matar a hostias o de un tiro en la cabeza a Esperanza Aguirre, del que Susana Griso no se pronunció a pesar de conocer de su existencia, ya que yo mismo envié la información a su programa.
Para terminar solo voy a dar otro dato que confirma que tanto Esteban Ibarra como el programa de Susana Griso mienten. Ayer mismo TVE informaba sobre las últimas noticias sobre el caso de la agresión en el Metro de Madrid, información que desvelaba que el agresor era multireincidente, y que este pertenecía al grupo de violentos al que pertenecía Carlos Palomino.
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9 que opinaron, anímate:
El guerracivilismo imperante implica que hay que dejarse matar por las hordas socialistas y comunistas
Lo de Esteban Ibarra ( ex miembro del FRAP de última hora ) no me sorprende, suele dar cancha a la extrema izquierda, de eso es de lo que vive.
Es más triste ver hablar a los contertulios de la Griso, son aprendices de todo y maestros de nada
Las agresiones de las imágenes son completamente injustificables, independientemtente de la ideología que tuvieran tanto el agresor como el agredido. Cualquier justificación de la agresión demuestra la miseria moral del que defiende al agresor.
Y ese tipo dirige el Movimiento contra la Intolerancia. Manda huevos. Para intolerante, él, que es capaz de justificar la violencia en función de las ideas del agresor.
Es repugnante de verdad pero en que país vivimos? y estos son los que se quejan de las barbaridades de franco? y sin embargo esto no les parece ninguna varvaridad que pena me da tener que compartir mi país con este atajo de chaqueteros que hoy pongo la agresión a mi favor y mañana en mi contra que pena dan así nos va siempre que mandan ellos nos morimos de hambre haber si el pueblo raciona y no les vuelve a votar en la puta vida
Sigo sin comprender como a este Ibarra se le sigue llamando a los medios, pero ninguno hace referencia a su pasado, cuando pertenecía a los GRAPO.
dejando a un lado el hecho de que susana griso me da un morbo del carajo, la verdad es que hemos llegado a un punto en el que tu vida no tiene mas valor que el que pueda tener tu opinion. si piensas como yo, te mereces vivir. si piensas de otro modo, mejor que no te cruces en mi camino.
fanatismo puro y duro
Las televisiones generalistas están totalmente infiltradas por los tontiprogres. Los tontiprogres son muy tolerantes salvo cuando son intransigentes y tergiversan la realidad para que se adapte a su visión fanática ideológica de izquierdas.
Están convencidos de que su intransigencia siempre es justa, porque ellos se sienten bondadosos y eso ya justifica cualquier desmán que hagan.
O sea, que si le abres la cabeza a uno por ahí, luego dí que eres antifascista y miel sobre hojuelas. Los tontiprogres acudirán en tu defensa como un montón de avispas zumbonas.
Tal vez los medios podrían haber contado que tras tener lugar el suceso al que tanto bombo se ha dado en los medios en el Metro de Madrid, y en el que Carlos Palomino resultó lamentablemente muerto, Josué Estébanez salió inmediatamente del metro y ya en la boca del mismo otro grupo de extrema izquierda que no tenía conocimiento de lo que acababa de pasar abajo le propinó una brutal paliza que le mandó varios días ingresado al hospital.
Tal vez esto hubiera ayudado a entender a la sociedad por qué Josué iba armado ese día cuando decidió volver solo de una manifestación legalizada por la Delegación de Gobierno utilizando un transporte público que iba a estar atestado de radicales de extrema izquierda "a la caza del rezagado", y por qué no dudó en defenderse del grupo de jóvenes que le asediaron en busca de problemas al verle solo. Precisamente por eso esta cara de la moneda no tiene repercusión en los medios.
¡¡JOSUÉ, JUICIO JUSTO!!
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