Aunque llevo unos días sin escribir ninguna entrada debido a las vacaciones de los pequeños de la casa, que como es lógico merecen toda la atención, hoy me ha dado tiempo a asomarme a esta ventana de denuncia para hablar sobre un tema que mantiene indignados a los madrileños.
Madrid está sufriendo el segundo día de una huelga salvaje e ilegal en los servicios de Metro, huelga en la que además de no respetarse los servicios mínimos, nos encontramos con que los matones de los sindicalistas agreden a los empleados que osan desafiar la imposición de UGT y CCOO de vulnerar la legalidad.
En primer lugar es necesario aclarar que estos dos sindicatos carecen de legitimidad para hablar en nombre de ningún trabajador, a la vista de su actuación en relación con los más de 5 millones de parados que sufren en silencio y sin apoyo las consecuencias del desgobierno que financia a estos sindicatos, cuyo único fin es mantener en el poder al mayor benefactor que han tenido.
Pero el trasfondo de esta Huelga va más lejos, y las salvajadas cometidas por estos sindicatos verticales solo vienen a demostrar como a la mínima oportunidad se intenta aprovechar la coyuntura para desgastar al Gobierno de la Comunidad de Madrid, Gobierno que los benefactores de los sindicatos saben que no alcanzarán de manera democrática, y contra el que se han empleado todo tipo de prácticas por medio de sus voceros, incluyendo en estos al propio Ayuntamiento de Madrid. Cabe destacar especialmente los sabotajes sufridos e investigados en el metro de Madrid, que ya evidenciaron que sus movimientos siempre han sido políticos.
Deberían explicar estos sindicatos, ¿Cómo es posible que con estos trabajadores se produzca una huelga así, mientras que por los demás no se ha movido un dedo y con los funcionarios se han respetado los servicios mínimos?, aunque seguramente esta pregunta es imposible de contestar sin evidenciar lo que se esconde detrás de ciertas acciones.
También deberían explicar cómo los Gays son ciudadanos de primera frente al resto de madrileños, ya que para que celebren su “fiesta” si habrá servicio de metro, pero para que los demás ciudadanos acudan a su trabajo, al médico y hospitales, no. En el siguiente audio además de escuchar las barbaridades que se dicen, también podréis escuchar lo referente al orgullo Gay.
Esperanza Aguirre ya ha anunciado que se abrirán expedientes disciplinarios, de los que algunos además terminaran en consecuencias penales, dada la gravedad de los hechos y el número de ciudadanos afectados.
Está claro que los trabajadores han perdido con sus acciones toda la razón que pudiesen tener, y solo deseo que los que han incumplido los servicios mínimos terminen en las listas del paro de donde nunca debieron salir, y menos con un puesto de trabajo que les convierte en privilegiados, ya que el elevado sueldo y la seguridad del puesto lo avala.
Rebélate y firma contra la subida del IVA
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7 que opinaron, anímate:
Los ciudadanos afectados deberían denunciar a los trabajadores del metro.
Pero fundamentalmente lo que se debería hacer es explicarles a esos trabajadores las repercusiones de su huelga salvaje y las consecuencias para ellos que pueden tener. Los liberados, como siempre, son unos manipulados al servicio de ciertos intereses y les suda la frente lo que les pueda pasar tanto a los trabajadores del metro como a los usuarios.
Los sindicatos UGT y CCOO son brazos políticos de socialistas y comunistas. Forman parte del aparato y están instalados en la mamandurría. Pero ésta huelga, como muchas de otras de sus actuaciones recientes, va a volverse contra ellos. Han permanecido impávidos ante la corrupción generalizada que ha imperado éstos años en el país que ha conducido a la quiebra de miles de empresas, a paros masivos, a la descapitalización de las Cajas y al desencuadernamiento del país, y ahora montan una huelga salvaje con trabajadores privilegiados, como bien apuntas en el artículo. En España ha desaparecido el sentido de legalidad, de responsabilidad y hasta el sentido común. La panda de trincones que hay muchos altos cargos, nos han metido en una crisis que durará como mínimo diez años y dejará al país medio arrasado. Hasta el propio ZP, según contó Cacho, y recogí en un post, dijo no hace mucho a un interlocutor en privado, "estos sindicatos son la maldición de España". HASTA EL PROPIO ZP SE HA DADO CUENTA.
Esto no quita para que los utilice, llegado el caso, o los tema.
Por otra parte, eso que dices de la atención a los niños... Un bloggero no tiene familia, no tiene vacaciones, no tiene horario,... je, je...
Entre su post y el comentario de Bucan ya está todo dicho.
Sólo matizaría a Bucan que los sindicatos no han permanecido impávidos, sino que han sido cómplices y sujetos activos, que en cuanto rascas un poco ves a los sindicalistas presentes en los consejos de administración de las cajas, de las empresas públicas, etc.
Es el pueblo español el que tiene que poner en solfa a esta panda de impresentables, el dia de las elecciones hay que acudir masivamente a votar, y ese es el momento de sacar del gobierno a Zapatero, pero la victoria del que sea que ocupe el gobierno debe de ser clara y con una mayoria lo suficientemente amplia para que luego no tengamos que depender de minorias, que con todos los respetos representan a una parte muy pequeña de España.
Ya anuncio desde aquí a las mariconas de Ugt y CCOO que en mi casa el dia 29 de Septiembre se irá a trabajar, no es mi caso, puesto que estoy en paro, y aunque la constitución garantiza el libre derecho de ejercer o no ejercer la huelga, me asegurare llevando un bate de beisbol de que ningun malnacido pueda coartar el derecho legitimo a no hacer huelga, y pobrecito/s de los que lo intenten
Lo que está sucediendo con esta huelga política y salvaje en contra de Esperanza Aguirre encaja en lo tipificado en en el artículo 315 del Código Penal (coacciones), castigados con hasta cuatro años de cárcel, y de abandono del servicio público, tipificado en el artículo 409 y castigados con multa de un año.
La ley debe caer como un mazo implacable sobre los promotores de esta huelga ilegal,salvaje, política, vandálica y sectaria.
Los ciudadanos de Madrid no pueden ser rehenes de esta caterva.
Si la izquierda dice que es capaz de todo o habla de matar, hay que creerla porque por historia podemos afirmar que cuando entra en el lenguaje revolucionario cumple con creces.
Los sindicatos han dado una vuelta de tuerca: si antes era ignorar los 5 millones de parados ahora la cosa consiste en tocar los cojones a los que aún conservan su trabajo a ver si con suerte logran que les echen. Estos esos sus poderes y sus intenciones.
No entiendo cómo han permitido que no se respetasen los servicios mínimos. Y no un día... ni dos... lo que querían hacer esta semana también.
He perdido 3 horas de trabajo para poder llegar a una revisión de una operación porque no paraban los autobuses, llenos a rebosar, y no había metro (y una no tiene para pagar más de 20€ de taxi para ir de punta a punta de la ciudad, ida y vuelta y encima para llegar a casa otros 15...).
Finalmente, los que lo pagamos somos los demás.
¿Qué pasaría si hicieran huelga general en los hospitales? En toda huelga hay que respetar unos servicios mínimos. Igual que con la de la basura. Es vergonzoso.
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