La fiscal Olga Sánchez pierde los papeles, se nota que según avanza el juicio y se constata por las declaraciones de testigos y policías que no cuadra nada de la versión oficial, los nervios afloran. Yo entendería que por motivos puramente laborales y al quedar en entredicho su trabajo, esta señora se ponga nerviosa, pero lo que no puedo llegar a comprender es su animadversión por ciertas victimas y estas claro son de la AVT. En la pasada jornada del juicio le pregunto en tono despectivo a una víctima si era de la AVT y agrego que tenía que dar gracias por estar viva. Estos lamentables hechos merecerían más que una explicación por su parte, pues su sueldo lo pagamos todos para que ejerza la acusación contra los malos no contra las víctimas. Aquí podrás leer la notica al completo.
Opinión: Julio Alonso.
Opinión: Julio Alonso.
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